Id por todo el mundo y hablan de las maravillosas buenas nuevas de salvación y esperanza a toda criatura.
Que cada oiga oído de la buena nueva de la salvación obrada por Jesucristo por medio de su sacrificio en la cruz del calvario.
Se ha convertido en una expiación para todos nuestros pecados, por Él y sólo a Él podemos encontrar la salvación.
No hay otro nombre dado a los hombres, en que podamos ser salvos.
Él y sólo Él nos puede salvar.
Para todos los que están dispuestos a creer en Jesucristo se le da el
poder de Dios para ser salvo, incluso a aquellos que creen en su nombre.
El Señor nuestro Dios está dispuesto a conceder la salvación a todos los hombres hasta el extremo.
No hay nadie tan miserable que no se puede guardar.
Venga a poner toda su confianza en Jesucristo y encontrar allí una expiación por todos sus pecados.
Amén.